Dos estatuillas del Óscar viajaron junto al presidente de la Academia, Tom Sherak, en un vuelo de United Airlines de Chicago a Los Ángeles, que para la ocasión se rebautizó como Óscar 1. Los chicos musculosos y dorados estuvieron entre las manos de los pasajeros, que se tomaron fotos con el preciado trofeo. Los empleados de la aerolínea hicieron un concurso a bordo con preguntas relacionadas a los Óscar y entregaron otros premios de parte de la Academia de las Artes y Ciencias Cinematográficas.

 

Un sobrecargo dijo que la ocasión era “irrepetible” e invitó a los pasajeros a disfrutar el “vuelo de los Óscar”. Las estatuillas se fabrican en Chicago y suelen enviarse a Los Ángeles sin hacer muchos aspavientos. ¿Así que por qué dejaron que los Óscar se mezclaran con los pasajeros? Por diversión, eso fue lo que dijo el presidente de la Academia.

 

Antes del despegue el piloto dejó que las estatuillas entraran a la cabina y dijo que eran el pasajero “no humano” más prestigioso. Sherak y otras autoridades de la academia escoltaron personalmente a los dos Óscar entre los pasajeros y a otros 40 que iban en el vuelo para llevarlos de la fundición R.S. Owens en los suburbios de Chicago hasta Beverly Hills, California.

 

Los integrantes de la tripulación aprovecharon para dar sus discursos de agradecimiento cuando tuvieron la estatuilla en sus manos. Una sobrecargo agradeció a su mamá, otra a Jesús y la otra a la Administración de Seguridad en el Transporte. La ceremonia de los Óscar se realizará el 26 de febrero.

 

Fuente: www.record.com.mx